Mindi Helmandollar-Armatas, etapa IV

Fecha de diagnóstico: 03/15/2010

Me diagnosticaron por primera vez con Fase 3 melanoma Cuando tenía 22 años, era animadora en la escuela secundaria y la universidad y nunca olvidaré tener que ser... broncearse para animar en los partidos. En la universidad, todos los miembros del equipo recibían bronceado gratis y se esperaba que fuéramos, especialmente cuando había piel Tan justo como el mío.

En el momento de mi primer diagnóstico, acababa de graduarme de la universidad y estaba esperando que mi actual esposo terminara sus estudios de posgrado. Después de 5 años de hacerme exploraciones cada 3 a 6 meses y de realizarme visitas regulares a la piel y al médico, me "gradué" de la células cancerosas instituto ya que la probabilidad de que mi melanoma se formara nuevamente era increíblemente baja.

Ocho años después de mi diagnóstico original de etapa 3, comencé a desarrollar vitíligo en mi espalda y todas mis pestañas y cejas se volvieron blancas. Luego desarrollé tos. Resulta que después de ver a varios médicos, tuve una tumor En mi pulmón. Tuve que extirparme el pulmón inferior izquierdo para poder sacar el tumor. Una vez que se analizaron los resultados, se determinó que se trataba de un melanoma, lo que lo convirtió en un tumor de estadio 4, ya que había hecho metástasis desde mi melanoma original hasta mi pulmón.

La primera vez que me diagnosticaron no tenía muchos amigos que comprendieran realmente la gravedad del melanoma, ni siquiera podía hablar de ello debido al desgaste emocional que me suponía. Esta vez hablo abiertamente (en su mayor parte) sobre el tema porque he descubierto que me ayuda a que otras personas comprendan más sobre el melanoma. También puedo ayudar a generar conciencia y a recaudar los fondos necesarios para que, con suerte, se pueda descubrir una cura.

Tengo mucha suerte de tener un sistema de apoyo tan grande, que ha sido clave en mi recuperación. Mi esposo, mis padres, mi familia y mis amigos han hecho una gran diferencia al ayudarme a mantenerme emocionalmente fuerte. Si necesito algo, sé que puedo simplemente pedirlo y ellos me ayudarán a encontrar las respuestas. Sé que no todo el mundo tiene esto y me siento muy afortunada de tener una red de apoyo tan grande. También estoy aprovechando todos los excelentes recursos que me ha ofrecido mi médico y recomendaría encarecidamente a otras personas que hagan lo mismo, como terapia y clases sobre alimentación saludable. Me he dado cuenta de que está bien aceptar la ayuda de los demás porque a ellos también les ayuda.

Ahora estoy pasando por Inmunoterapia Durante el próximo año, tendré que ir cada dos semanas durante un par de horas para recibir el tratamiento. Estoy muy agradecida de que este tratamiento exista porque hace ocho años no había nada disponible. Algo con lo que más lucho actualmente es tener que cambiar los planes que tenía establecidos para el próximo año para poder centrarme en mi salud. Al menos ahora tengo la oportunidad de vencer esto de una vez por todas, aunque sé que será una batalla de por vida mantenerme libre de cáncer.